La Maravillosa Calle Hatun Rumiyoc
Conozcamos la calle Hatun Rumiyoc (Roca Mayor) y su admirable arquitectura inca que se aprecia en casi toda la calle.
Esta calle es de una sola cuadra. Se encuentra cerca de la plaza de armas del Cusco. Para llegar, se toma la calle Triunfo y te lleva directamente a Hatun Rumiyoc. Esta última termina en la calle Choquechaca.
Es de acceso peatonal. Allí se encuentra el palacio arzobispal o museo del arte. Este palacio antiguamente fue atribuido a Inka Roca, primer inca de la dinastía Hanan Cusco. En sus muros encajan perfectamente las piedras ¨diorita verde¨. En el impresionante tejido del muro se puede visualizar la piedra de los doce ángulos, famosa por el perfecto encaje de sus esquinas con las demás piedras que no permite insertar ni una aguja en sus uniones.
Sobre los muros que sirvieron como sostén del palacio de Inka Roca, ahora se puede apreciar la arquitectura colonial y republicana. Estos tres estilos presentes nos permiten comparar la habilidad de los talladores del imperio y su particular estética.
Durante todo el año, ya sea de día o de noche, se puede visitar y transitar esta calle histórica. A cada paso, entrando por la Calle Choquechaca, se muestran diferentes negocios turísticos: restaurantes, tiendas artesanales, talleres de tallado, pintura etc.
Sobre el piso empedrado también se puede ver a los artesanos de diferentes nacionalidades ofreciendo sobre sus telas los trabajos realizados: pulseras, collares, tejidos, anillos entre otros adornos.
Intersectando la calle Hatun Rumiyoc, está la calle Inka Roca. Ésta rodea al palacio arzobispal. En sus muros se puede ver las siluetas de un puma, una serpiente y el vaso ceremonial ¨quero¨.
Con cada hora, la luz cambiante sobre las piedras perfectamente talladas, crea diferentes escenas de hermosura.
Para los visitantes y cusqueños, estos muros son libros abiertos. Allí se puede tocar, sentir e imaginar todo lo sucedido en esta calle. Parece mágica pero es real ante los ojos del mundo.