“A las calles,” vino la convocación por todo Perú y ayer hubo marchas numerosas en las ciudades grandes del país con el fin de enseñar fuerza y presionar.
En el Cusco, casi 70 personas se reunieron en el Paraninfo y, liderizadas por jóvenes mujeres fuertes de Genero Rebelde Cuzco y del Comité Wanchaq del Frente Amplio. Marcharon por la Avenida El Sol antes de seguir por Ayacucho. Se dirigieron a San Francisco para luego retornar a la Plaza de Armas.
Mientras la convocatoria atrajera a mayores números de manifestantes en otras ciudades, en Lima la marcha extendió unas veinte cuadras, la energía de los manifestantes en el Cusco era fuerte y llamaba de atención de jóvenes y mayores por toda su trayectoria.
La marcha tuvo el fin de protestar por las amenazas políticas en contra del Ministro de Educación, Jaime Saavedra Chanduví, tanto como desafíos a la educación pública, por Fuerza Popular, el partido fujimorista que domina en el Congreso Nacional. Los partidarios de Keiko Fujimori cuestionan la nueva Ley Universitaria. Como respuesta, los manifestantes en el Cusco clamaron “Saavedra no se va” por la exigencia de FP que el ministro renuncie a su posición.
Los analistas atribuyen la crisis política resultante a la necesidad de Fuerza Popular de enseñar su poder frente a la administración de Pedro Pablo Kuszcynski por razones de conflictos al interior del mismo partido.
Con el apoyo del SUNEDU, Frente Amplio, y numerosos estudiantes, los manifestantes tomaron las calles para recordar al congreso, y al gobierno, del poder de los peruanos cuando se organizan. Los manifestantes exigieron que se tomaran en serio sus intereses en el bienestar del Ministerio de Educación, su ministro, y de una educación de calidad en medio de la medición de fuerzas entre el gobierno y el congreso.
