Una agencia de viajes: una experiencia que nunca acaba

Tener una Agencia de viajes empieza con un sueño, que luego se convierte en una idea, idea que con mucho esfuerzo se convierte en un proyecto, que para hacer realidad requiere de muchos factores como por ejemplo:

– Superar los miedos, miedo a que fracase la empresa, a que las cosas no funcionen como lo pensaste, pienso que esto le pasa a todo aquel que quiere hacer empresa por primera vez y a veces esto ocurre porque nuestros familiares o pareja en algunos casos nos meten ideas en la cabeza como “no va a funcionar”, “ piensa bien las cosas”, “Mejor haz otra cosa”, en mi parecer la vida está llena de riesgos, que uno debe tomar, la vida es una sola y es en esta vida donde tenemos que dar ese paso de superar nuestros miedos para hacer realidad nuestros sueños.

– El factor dinero es muy importante, muchas veces se piensa que si no hay una buena cantidad de dinero no se puede empezar el proyecto, y esto para mi es mentira, es cierto que el dinero es importante pero con una cantidad base y buenas ideas, empezando de lo bajo, uno puede hacer crecer poco a poco una empresa, no necesitas empezar como una agencia grande, operadora, puedes empezar como una agencia pequeña , endosadora pero nunca perdiendo la meta principal que es convertirte en una gran agencia.

– Encontrar un equipo de trabajo comprometido con la empresa, dinámico y con muchas ganas de superación y de lograr grandes cosas en equipo, pues este equipo se convertirá en el motor de la empresa y de la solidez que adquiera dependerá el éxito o fracaso de la misma.
– Estar capacitado, conocer bien lo que uno ofrece, saber de cultura e historia y sobre todo si uno quiere llegar a más clientes, tener conocimiento de idiomas, esto no es fácil pero con esfuerzo todo es posible.

Tener una agencia de viajes es un conjunto de experiencias que nunca acaban, pues cada día se aprende nuevas cosas, se conoce a nueva gente, a veces podemos pensar que lo sabemos todo, pero eso es un gran error, uno nunca deja de aprender.

Tener una empresa en la que se trabaja con nuevas personas de diferentes países, culturas, costumbres, lenguas, no es algo fácil, uno tiene que estar preparado para todo, y preparar muy bien a su equipo de trabajo, sobre todo a ser muy pacientes, porque cada persona es diferente, y se encuentra en un país completamente diferente, en la agencia tenemos un lema “tratar a las personas como nos gustaría que nos traten “.

Organizar los tours es llegar a formar parte del grupo a quienes les organizas el tour, es convertirse en su cómplice, es volverte su familia, y cada vez que organizamos un nuevo grupo lo hacemos como si fuera el primero, con toda la emoción, fervor y compromiso de trabajo, siempre sonriendo, mostrando a los demás la riqueza de nuestra cultura. Dice mi padre; que uno tiene que elegir hacer lo que realmente a uno le gusta si es que quiere ser feliz, porque lo que elijas hacer es como una mina de oro el cual explotaras toda la vida y creo que es cierto.

La parte más gratificante de tener una agencia de viajes, y que me hace tan feliz y me da la energía para seguir trabajando son las gracias de la gente, las palabras de elogio y las recomendaciones que nos hacen para con sus amigos, familiares etc. Estas me hacen sentir realizada profesional mente y es la mejor recompensa que podemos recibir de nuestros clientes.

Nuestra meta como Agencia es ofrecer a nuestros clientes una experiencia inolvidable, una gran aventura que siempre quedara en sus corazones, logrando que se sientan «como en su propia casa», ofreciéndoles servicios turísticos de alta calidad en un país rico en cultura, ofreciéndoles un equipo de profesionales calificados que se identifiquen con los objetivos de la empresa y a las preferencias de nuestros clientes.