La ciudad del Cusco, declarada por la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad en el año 1983, tiene una importancia y valor histórico y cultural. Es una ciudad que conserva huellas de edificaciones incas combinadas con arquitectura española, que la hace única e incomparable.
Con tantas denominaciones adquiridas es lamentable que nuestro centro histórico tenga una problemática muy seria y dramática, me refiero a la presencia de cables de todo tipo, lo cual pone en riesgo nuestro centro histórico. Sólo basta con elevar la mirada para darnos cuenta de que el espacio aéreo de nuestro centro histórico y calles aledañas se encuentra invadido por una maraña de cables de luz y telecomunicaciones, cables que están amontonados en paredes y postes atravesando de forma desordenada las calles.
Este problema pone en riesgo no solamente a la imagen del centro Histórico, sino también a las personas de la cuidad y turistas que transitan por estos lugares. Es de resaltar que el Cusco es una ciudad netamente turística.
Hace más de cinco años el gobierno municipal del Cusco, emitió una ordenanza mediante la cual se le otorgaba un plazo prudencial a las empresas de Electro Sur Este y la Ex telefónica del Peru (hoy denominada Movistar) a que retiren el cableado aéreo que contamina visualmente el centro Histórico y que atenta contra la arquitectura colonial y balcones, pero lamentablemente no se cumplió dicha ordenanza.
Para alegría de todos los Cusqueños y a iniciativa de la Dirección Desconcentrada de Cultura de Cusco, en coordinación con la Municipalidad Provincial del Cusco, estas empresas que brindan servicios de telefonía y de suministro de energía eléctrica realizaron el día de ayer el retiro del cableado aéreo ubicado en los portales de la Plaza de Armas de Cusco y en las calles aledañas, este proyecto tiene varias etapas y en la primera etapa se retiró más de 5 toneladas de cables en desuso que durante mucho tiempo causaban un impacto visual negativo a los inmuebles del Centro Histórico y un riesgo a los transeúntes.
En una segunda etapa se continuará con el retiro de cables de conexiones piratas, que actualmente se viene haciendo un seguimiento para identificar a los responsables y así sancionarlos de acuerdo a ley.
En la tercera etapa se ha previsto reubicar el cableado, que será mimetizado con los muros para reducir el impacto visual.
Actos como estos, nos llenan de alegría y satisfacción a los cusqueños, pues nuestro centro histórico se tiene que respetar y cuidar, porque es parte de nuestra historia y de nuestra identidad.
