Hoy 18 de octubre, se celebra el día Mundial de la Protección de la Naturaleza, el objetivo central es concientizar a toda la población mundial sobre el daño que causamos los seres humanos, consciente e inconscientemente al medio ambiente.
Esta celebración se lleva a cabo desde 1972, con la necesidad de cuidar el planeta, acerca de la contaminación del medio ambiente y la biosfera, la dilapidación de los recursos naturales, el crecimiento sin freno de la población y la sobre estimación de la tecnología. Es necesario revertir la dirección de esta marcha, a través de acciones mancomunadas internacionalmente.
Actualmente el principal objetivo de la Naciones Unidas, es conseguir un mundo más sostenible, esto es lo que se promueve en la agenda 2030, lograr que todos los países obtengan su desarrollo sin afectar a la naturaleza.
Es una misión global para revivir miles de millones de hectáreas, desde bosques hasta tierras de cultivo, desde la cima de las montañas hasta las profundidades del mar. Solo con ecosistemas saludables podemos mejorar los medios de vida de las personas, contrarrestar el cambio climático y detener el colapso de la biodiversidad.
La pandemia por COVID-19 también nos demostró que la pérdida de los ecosistemas puede ser un hecho de extrema gravedad, pues estamos creando las condiciones ideales para que los patógenos -como es el caso de los coronavirus- se propaguen entre los seres humanos.
Hay que mencionar que se ha dejado claro que la protección de la naturaleza no es tarea exclusiva de ambientalistas, sino más bien, es responsabilidad de todas las personas en el mundo, puesto que todos dependemos de la naturaleza.