Hace cien años, el viernes 1o de abril pasado, Victor Vaughen Morris abrió el Morris’ Bar en el centro de Lima, Peru. Conocido por el pisco sour, una bebida que se hizo la bebida bandera del Perú, el bar se hizo un punto de concentración importante en la ciudad.
Su dueño, Victor V. Morris, vino al Peru de Salt Lake City, Utah como parte de las actividades relacionadas con the Cerro de Pasco Investment Company. Organizada desde los Estados Unidos, esta empresa se hizo la corporación minera mad grande en el Perú y dominó la economía del Perú central. Liderizó una transformación de la minería y de la sociedad peruana en la cual las viejas familias oligárquicas fueron reemplazadas por los inversionistas en minería y comercio internacionales.
El desarrollo de la Cerro de Pasco Corporation dependía del trabajo de Alfred McCune, también oriundo de Utah.
Nació en Calcutta en la India, donde sus padres se hicieron Mormones e inmigró a Utah cuando tenía seis años. Después de construir un imperio de negocios en ganadería, construcción de ferrovías, y minería, McCune se sintió atraído al Perú y en 1897 organizó una empresa minera que se volvería la Cerro de Pasco Company.
Además de atraer a inversionistas importantes estadounidenses y británicos, y cambiar por bien o mal la vida de Peruanos rurales y urbanos, esta empresa jaló a muchas personas de Utah al Perú.
Entre ellos se encontraba a Victor Morris. En 1903 dejó su hogar en el borde de la gran cuenca norteamericana, una región de religión, ferrovías, minas, y comunidades socialistas agrícolas para trabajar en la ferrovía de la Cerro de Pasco Company en el Perú.
Su padre, Richard Vaughan Morris, emigró de Gales a Utah en 1855. En el filo de lo que se hizo una inundación de galeses quienes vinieron a este Sión del desierto después de hacerse mormones, Richard V. Morris se entrenó en un bufete de abogados en Liverpool, el puerto del cual tantos galeses zarparon para América y luego viajaron a Utah. Mientras se encontraba todavía en Gran Bretaña, Morris comenzó a trabajar en los asuntos de la administración de la iglesia mormona.
Ya estando en Utah trabajo como presidente de la Empresa Utahna de Jabones, auditor de la Ferrovía Central de Utah, secretario de la Empresa de Telegrafía de Deseret, y secretario de la Sociedad de Agricultura y Manufactura de Deseret. Esta última fue una asociación combinada del gobierno del territorio de Utah y de la Iglesia cuyo fin era promover agricultura y manufactura, mientras que la iglesia fue el socio mayor de la empresa de telegrafía. Junto con esta combinación de negocios privados y eclesiales, Morris fue el tercer obispo del Barrio 19 de la Iglesia en Salt Lake City. El barrio fue (y sigue siendo) tanto una ubicación geográfico dentro de la ciudad, el lado occidental de la colina del capitolio, es asimismo una congregación mormona.
Fue prominente en la sociedad mormona de aquel entonces el señor Morris y fue polígamo con tres esposas a la vez. Murió en 1882, casi cinco años del fallecimiento del líder mormón Brigham Young y en los comienzos de unos cambios radicales en Utah cuando la iglesia mormona fue obligado por el gobierno de las EE.UU. a deshacerse de su economía y de la práctica de poliginia. E la vez llegaban las ferrovías y los intereses mineros se hicieron cada vez más fuertes.
Su hijo mayor del primer matrimonio, Richard P. Morris, iba escalando la jerarquía de la municipalidad y se hizo el alcalde de la ciudad de Sal Lake. Otro hijo del mismo matrimonio trabajó como telégrafo en la Empresa Deseret de Telegrafía tanto como en la Compañía de la Ferrovía Sr. Después de trabajar como agente y operario para la ferrovía se hizo oficinista en la Compañía Minera Platera Horn y llegó a ser su gerente general.
Victor perteneció a la segunda familia. Su abuelo materno, Nathaniel Vary Jones fue asimismo un mormon prominente polígamo quien fue obispo del Barrio 15. En 1952 fue enviado por la iglesia como misionero a la India y logró ser presidente de la misma. Mientras estuvo allá, sea en Calcutta u otro lugar, conoció sin lugar a dudas y habrá frecuentado a su padre de Alfred McCune quien también fue misionero de la iglesia mormona en la India. Esta conexión puede ser parte de la razón por la cual Victor Morris fue reclutado y aceptó acompañar a la empresa de McCune en la aventura peruana.
El segundo de los tres hijos varones de la segunda familia, Victor Morris y su hermano mayor, Burton C. Morris se juntaron con su hermana Clara y su hermano Richard de la primera familia para estableces una florería que llevó el nombre de Burton.
La Florería B.C. Morris fue más que una empresa familiar y nos enseña algunas de las conexiones que militaran a favor del viaje de Victor Morris al Perú. Incluía a Pennel Charington, un abogado que trabajaba también para las ferrovías, a Tomas Hobday quien se hizo prominente en Salt lake al proporcionarle un surtido moderno de agua, y a John MacMurdy, un abogado de Cripple Creek Colorado quien se involucraba con las ferrovías y la minería.
En 1987 B.C. Morris compró otra florería, la Dwyer Floral, tanto como los invernaderos de Lafayette Floral. Asimismo trabajaba como oficinista en varios negocios.
Fue muerto en un conflicto público que llenó los periódicos del momento y el homicida no fue convicto por la corte. El Historiador Guillermo L. Toro-Lira, con los descendientes de Victor Morris, atribuye la muerte y falta de justicia para su hermano como algo que le amargó en cuanto al sistema de Utah y le motivó a salir de su hogar para el Perú.
A pesar de la tragedia de sus hermano y su amargura, Morris siguió trabajando como florero por un buen tiempo, aunque también a cumplir el papel de auditor con la Ferrovía Oregon Shortline.
Su familia y sus conexione personales con la industria ferroviaria le llevaron al Peru, junto con muchos Utahnos más, donde trabajaba en la ferrovía construida por la Cerro de Pasco Corporation, antes de jubilarse y poner su bar en Lima.
