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El Poder de los Jóvenes Varones y el Caporal

Los cascabeles suenan y las botas golpean la calle, mientras jóvenes en vestimentas coloridas bailan agresivamente pero con un control que pareciera que en cualquier momento podría soltarse. Una demostración de testosterona y masculinidad, este baile atrae a los jóvenes hombres y les motiva a mostrar su esencia y sus habilidades.

Esta danza es el caporal, una de las más populares de la altura. Originó en La Paz, Bolivia de la tradición de danzas afro-Bolivianas y se ha conquistado cada vez más espacio. Anoche in Cusco, para la frustración de muchos que prefieren que sus propias danzas sean exclusivas en sus calles, se vio comparsa tras comparsa de caporales danzar por la Avenida El Sol y la Plaza de Armas.

Ampliamente considerada una manifestación de la cultura altipánica, la gran planicie que incluye La Paz y Puno, el caporal atrae fuertemente a la juventud de la ciudad del Cusco. En su raíz se debe esto a la población puneña residente en Cusco. La región de Puno, y sobre todo su gran ciudad de Juliaca, se conoce con un centro comercial. Se combinan acá los caminos de Arequipa y la costa, Tacna y la frontera con Chile, y Bolivia, con conexiones a Argentina y Brasil.

Los puneños han venido a la ciudad Imperial para hacer comercio, como lo han hecho por siglos si no milenios. Dentro del Cusco se organizan en hermandades tanto en los mercados como en los distritos y parroquias para apoyarse mutuamente mediante números de personas y de organización. A la vez, siguen las tradiciones de su tierra y representan esa existencia en grupo mediante comparsas, y node cualquier danza, sino de la urbanas con pujanza que van amoldando su región.

En una época anterior trajeron otra danza altiplánica al Cusco, la que ahora se llama qhapaq colla. Es una de las danzas clásicas ahora del repertorio cusqueño aunque cuando llegó casi no la aceptaban. Llamada también llamerada, esta danza representa a los comerciantes indígenas que llegaron al Cusco de la zona poderosa del altiplano trayendo bienes.

Aunque fue resistido inicialmente, la danza se hizo parte del código de danzas cusqueñas. Sin embargo, es muy diferente del caporal que tanto inquiete a las élites cusqueñas y a tantos otros.

El caporal representa a los capataces mestizos o cholos quienes controlaban a los esclavos para sus amos españoles. Es una danza fuerte con violencia latente apenas controlada ya que con fuerza y agresión personal pudieron controlar la rabia y rebelión potential de los esclavos. Esta fuerza personal se llama kallpa en Quechua y es una idea importante por estos lares.

Por supuesto que hace tres generaciones los jóvenes que ahora bailan de caporales hubieran sido peones en las haciendas, controlados ellos mismos por capataces mestizos y a veces cholos, muchas veces mediante la amenaza permanente de violencia.

El poder descontrolado y la violencia potencial de la juventud masculina preocupa a las élites que procuran siempre controlarlo. Esta danza, sin embargo rompe con las ideologías indigenistas y neo-Incas que dominan la cultura pública cusqueña, incluyendo sus danzas.

En cuenta de indigenas, se representan a mestizos o cholos. No es un baile hermoso y controlado, es poderoso y agresivo, siempre amenazando con desborde. En vez de un baile que enfatiza las parejas de la ideología dominante burguesa, enfatiza masas de hombres y bloques de mujeres con mini-polleras. No es un baile domesticado como los majeños y maqtas. Un bloque de varones jóvenes, llenos de adrenalina y de su sexualidad, baila con precisión acrobática y comen la calle como si fuera suya.

Esta imagen de jóvenes poderosos y con gracia quienes enseñan su virilidad a la sociedad y, sobre todo, al grupo de mujeres jóvenes quienes les acompañan es en buena parte lo que atrae a tantos jóvenes a la danza. Es la manifestación y la realización de un sueño de sí en la vida urbana donde pueden proponerse y realizarse.

Es un baile paradigmático del cholo alzao, el que pretende, y mediante su fuerza y personalidad toma la sociedad y el mundo para hacerse alguien. Como resultado el caporal seguirá expandiéndose y se apoderará de más y más jóvenes en el altiplano y en el Cusco, quiérase o no. 

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